Cerrando nuestros gaps de performance

bridge-gap-potential-performance-puzzle-d-illus-bridge-gap-potential-performance-puzzle-d-94423679.jpg

Esta vez estoy tomando algunos conceptos interesantes que encontré en el libro “Winning from Within” de Erica Ariel Fox. 

No pocas veces vivimos en carne propia “el gap de performance (o rendimiento)”. Éste se da cuando enfrentamos una situación en la vida o en el trabajo, y nuestra reacción está por debajo de la reacción “óptima”. La diferencia entre ambas reacciones es el gap de performance.

Por ejemplo, cuando planeamos escuchar a nuestra pareja y de repente nos encontramos alterados y alzando la voz, o cuando intentamos colaborar con otra persona, pero nos vemos rígidos y cerrados en nuestras opiniones, o cuando decimos algo que después nos arrepentimos, o cuando nos quedamos callados mientras sabemos que deberíamos aportar a la discusión.

Para cerrar los gaps de performance, normalmente tenemos que acceder a partes de nosotros que parecieran estar “ocultas”.

1.       Somos más multifacéticos de lo que pensamos.  Realmente podemos hacer más cosas que las que normalmente hacemos en nuestro día a día.

2.       Nuestra identidad define nuestras opciones. Si me defino como “Hombre Latino” veré el mundo desde esta “óptica”.  Lo importante es entender que las identidades que formamos tienen alguna verdad en ellas, pero que no dicen toda la verdad. El que yo sea hombre y latino, no define que mi comportamiento deba ser machista (o algún otro estereotipo predefinido).

3.       La identidad que mostramos al mundo, y a nosotros mismos, no necesariamente es falsa. Pero tampoco es totalmente verdadera.  Así que podemos ser flexibles y adoptar otros comportamientos que nos ayuden a superar el gap de performance.

4.       Ganamos mucho cuando reconocemos una parte de nosotros que está ausente en nuestro perfil y lo expandimos para incluir eso que está ausente.  Autoevaluarnos y conocernos es clave para buscar aquello que no tenemos y desarrollarlo en nosotros, por ejemplo, si mi perfil es más de una persona que mira el todo y no cuida los detalles, sabemos que a veces es importante ver los detalles, así que podemos desarrollar más esta característica al reconocer esta deficiencia en nosotros y la podemos ir adquiriendo poco a poco.

5.       Los cambios significativos no pasan de la noche a la mañana.  Así que paciencia y trabajo, al final esas facetas “ocultas” nos pueden ayudar a ser la mejor versión de nosotros mismos.

Para cerrar los gaps de rendimiento, debemos aprender a desarrollar nuestro perfil actual.

Ánimo, y a crecer en Actitud.

 

Anterior
Anterior

Puedes liderar como el Coach del Trillón de Dólares

Siguiente
Siguiente

Prepara, Dispara, Apunta: Define y Prioriza tus metas